Este libro me gustó y me sorprendió mucho. En principio me llamó la atención por la portada y después por la sinopsis ya que hablaba de una chica que monta una tienda de moda vintage y como levanta el negocio. Pero lo que luego te encuentras es que lejos de ser un libro ligerito, es un libro profundo con una historia de amistad y de guerra en segundo plano que acaba ganándose el protagonismo del libro. La protagonista conoce a un personaje que le cuenta la historia de su infancia y cómo les afectó la guerra y como una amiga suya acabó en un campo de concentración. La historia es bonita, emotiva y no es para nada el típico libro de guerra triste y con escenas muy duras a los que estamos acostumbrados sino un libro esperanzador. Lo recomiendo mucho pese a que no me gusta el género bélico. El estilo de la autora es muy fluido y la edición es muy comoda de leer. |