Algo alrededor de tu cuello de Chimamanda Ngozi Adichie
No era sólo a tus padres a los que querías escribir, también a tus amigos, a tus primos y tíos. Pero no podías permitirte comprar suficientes perfumes, bolsos y zapatos para todos, y pagar el alquiler con lo que ganabas de camarera, de modo que no escribías a nadie. Por la noche algo se enroscaba alrededor de tu cuello. Algo que casi te asfixiaba antes de que te quedaras dormida. |