La escritora de Auður Ava Ólafsdóttir
Tú eres un glaciar resplandeciente, mientras que yo soy solo una colina insignificante. Tú eres amenazadora, yo inofensivo.
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Calificación promedio: 5 (sobre 72 calificaciones)
/Mi primer contacto con la escritura fue en el momento en que aprendí a escribir, como a los seis años. Solía cambiar el argumento de los libros infantiles que leía, añadiéndoles frases de mi propia cosecha. Recuerdo específicamente cambiar los finales. Esto significa que mis primeros escritos fueron correcciones de libros escritos por otros. Años más tarde me encontré con un profesor de mi infancia que me contó que yo le había preguntado a qué personas se permitía convertirse en escritores. «A todo el mundo» fue su respuesta.
Siempre hay más de un punto de partida para cada relato. Uno de los puntos de partida de esta novela fue cuando descubrí que una mujer que quisiera convertirse en escritora en los años sesenta en Islandia estaba sola. Los artistas hombres veían a las mujeres como sus musas, sus fuentes de inspiración y poco más. El papel de la mujer era el de apoyar y estimular al hombre. Daba igual si la mujer tenía algún talento artístico. El mito sobre la genialidad del escritor varón está aún muy arraigado. Lo vemos en infinidad de películas de Hollywood. Pensé que había llegado el momento de escribir un libro que hablase sobre una mujer que fuese talentosa y escritora. La Escritora es una novela sobre todo el talento perdido en el mundo, los talentos que nunca se descubrieron, tanto de hombres como de mujeres. Va sobre personas creativas que podrían haber existido si la sociedad hubiese sido diferente. Hubiera podido elegir otro período, pero como exhistoriadora del arte soy especialista en el arte islandés de los años 60 por lo que me resultó fácil acceder a ese universo.
No estoy segura de que la gente piense mucho en el oficio del escritor. Es cierto que algunas personas pueden sentir cierta curiosidad sobre cómo funciona la imaginación, ¡O sobre cómo alguien puede trabajar catorce horas al día sin que nadie le obligue a hacerlo! No creo que mi escritora tenga una idea romántica del oficio. al contrario, mi heroína no es una bohemia ni tampoco miembro de ningún gremio de poetas. Su novio poeta dice «Se requiere tanto tiempo para ser poeta». Según el mito, un escritor hombre nace poeta. Para Hekla, ser poeta no es cuestión de tiempo sino de ponerse a escribir. al mismo tiempo tiene que encontrar una manera de ganarse la vida.
En los años sesenta, Islandia era una isla muy aislada, muy distante del resto del mundo. En 1963, que es cuando transcurre el relato, la isla tenía 177.000 habitantes, un premio Nobel de literatura (Halldor Kiljan Laxnes) y dos aviones transatlánticos. Ah, y más de 100 volcanes activos como ahora. No había turistas ni extranjeros en la isla, a excepción de los soldados de una base militar estadounidense. Era una sociedad conservadora y patriarcal. Los que ostentaban el poder, en el mundo literario o en el de la política, eran todos del mismo sexo y edad, es decir hombres de cincuentaytantos. Había muy pocas, casi ninguna escritora mujer en Islandia en esa época. Era un país caracterizado por la homosociabilidad, integrado por hombres que hacían piña entre sí.
Totalmente. Su amistad-amor es la relación más importante del libro. Es la historia de dos personas marginadas pero creativas de veintipocos años que no encajaban en un país tan conservador pero que se apoyaban mutuamente de una manera muy bella. Es importante tener alguien que crea en ti. de hecho, libro relata la historia de tres personas creativas (incluida Ísey, un ama de casa con un bebé que sueña con convertir las pequeñas cosas del día a día en algo más grande y bello. En aquella época, muchas personas que no tenían la orientación sexual apropiada, como Jón John, huían al extranjero, habitualmente a Copenhague. Pero la pregunta que formula el libro es: ¿hacia dónde puede huir una escritora que escribe en un lenguaje marginal, minoritario, que nadie entiende? En el contexto de la novela, la patria (yo la llamo la madre patria) de un escritor es la lengua en la que escribe.
Existe un paralelismo en la novela entre dos fuerzas creativas por antonomasia: la naturaleza y la literatura. Por esa razón, decidí llamar a mi heroína como el volcán, Hekla, ¡Que era considerado en el pasado como la antesala del infierno! En cuanto a mi propio nombre, yo era la cuarta de cinco hermanos y, cuando nací, mis padres ya habían puesto a mis hermanos mayores los nombres de nuestros abuelos y abuelas por lo que aparentemente mi padre eligió un nombre que le gustaba mucho y que significa que algo es «precioso», aunque también puede usarse como adverbio en islandés con el significado de «vacío». Me gusta mucho ese significado ya que es tarea del escritor ordenar el caos y dar sentido a ese vacío.
No existe tal cosa como un texto inocente. Todo lo que un escritor plasma en una novela tiene su razón de ser. Todo en mi libro, el entorno, el paisaje, está relacionado con la voz del narrador, que habla a una cierta distancia de sí mismo. Se trata de un paisaje melancólico con campos de lava y un clima imprevisible. Además, toda novela tiene su propia música, que es distinta de la de cualquier libro anterior. Traducir esa música a su lenguaje es una de las partes más difíciles del trabajo de un traductor. En este libro en particular me dedico a experimentar un poco con el tiempo acortando más los textos que en mis novelas anteriores. Eso significa que el lector deberá leer entre líneas, como si se un poema se tratara.
No. A diferencia de mi personaje, que tiene veintitantos años, yo empecé a escribir tarde. Trabajaba como historiadora del arte y como profesora en la Universidad de Islandia. Tenía 37 años cuando empecé a escribir y mis hijos tenían uno y seis años. Escribía por las noches y durante los fines de semana. Las mujeres escritoras parecemos estar predestinadas a esa clase de vida. de modo que si hay algún personaje con el que me identifico en la novela ese personaje sería Ísey, la amiga de la infancia. Un ama de casa que tiene que cargar con un bebé y que tiene otro de camino pero que se siente capaz de «tocar el cielo con su lapiz». Algunas de sus ideas sobre la creación son mías. Sin embargo, creo que la imaginación es una parte importante de la realidad. Mi heroína lucha por conseguir que le publiquen su ingenioso libro, pero en mi caso, mis obras han sido traducidas a 33 idiomas. Dicho esto, mi heroína y yo compartimos el mismo destino. Ambas escribimos en un idioma minoritario accesible a pocas personas. Y una mujer escritora sigue estando bastante sola.
Siento tener que destruir ese mito, pero Islandia tiene tan pocos habitantes que parece ser el país con la tasa más alta por habitante en un montón de cosas. Escribir poesía es bastante popular entre los jóvenes del país, y en Islandia es más común que en otros autofinanciarte tu primer libro. ¡Y eso cuenta! El gobierno también tiene un sistema de ayudas y becas para escritores, que pueden solicitar un salario durante 3, 6 o 12 meses, lo cual no es poca cosa. Las poetas y escritoras jóvenes reciben mucha atención positiva en la actualidad, ¡especialmente tras editar su primer libro! Y los escritores hombres están felices de poder darles una palmadita en la espalda.
Me gusta trabajar con distintos tipos de textos y no me resulta difícil pasar de uno a otro. Me gusta retarme y hacer siempre algo nuevo. He escrito 8 libros y 5 obras de teatro en mis 20 años como escritora. También he colaborado con algunas coreografías de baile y escrito letras para algunas canciones del grupo pop Milkywhale. Me encanta el teatro. Es probable que en el futuro dedique más tiempo a escribir obras de teatro.
Desde que se editó La Escritora he publicado otra novela que tuvo su lanzamiento en Islandia a finales de 2020. El título podría traducirse como Vida animal o El animal humano. Cuenta la historia de dos comadronas, la mayor de las cuales es tía abuela de la más joven. En islandés, comadrona se dice ljosmodir, que significa madre de la luz. Como indica el título, es una historia del animal humano, pero también del significado de la luz en un mundo de penumbra. Actualmente estoy trabajando en una nueva novela y en una obra de teatro.
Mi primera novela. No fue un libro que haya encontrado en ningún sitio. Un día sentí que tenía una historia que contar y cuando imprimí el primer manuscrito de mi primera novela supe que tenía una voz diferente.
Ninguno. Admiro las cualidades literarias de otros autores, incluso las de quienes escriben guías de conversación para turistas, pero nunca he querido ser otra persona.
Una de las sagas islandesas escritas en el siglo XIII en islandés, la saga de Laxdaela. Tenía 11 años cuando la leí por primera vez. Me quedé fascinada por la rebelión de un personaje femenino llamado Melkorka, por su silencio, ya que fingía ser muda.
Los textos de Nietzsche. Leo a Nietzsche como otros leen libros de cocina o novelas policíacas. Me da un enorme placer. También podría mencionar Los pensamientos de Pascal.
Creo que sólo puedes avergonzarse de algo que has hecho pero no de algo que no has hecho.
No se lo podría decir porque lo que se considera clásico varía mucho de un país a otro. Nuestros clásicos son las sagas islandesas. ¡Cervantes y Federico García Lorca claramente no están sobrevalorados! ¡Pero sí podría pensar en muchas mujeres escritoras que fueron infravaloradas en el pasado! Como la poeta del siglo XIX Emily Dickinson, ¡tan audaz y tan moderna!
Recientemente leí los diarios y las cartas de un escritor feroés llamado Jörgen-Frantz Jakobsen que murió de tuberculosis a los 36 años. El libro se llama Precious Life y me causó un gran impacto.
«No es difícil dominar el arte de perder», escribió la poeta estadounidense Elizabeth Bishop en su famoso poema sobre la pérdida, donde nos cuenta cómo ella –y todos nosotros– pierde algo cada día: las llaves de casa, un reloj, una madre, una casa, «dos ríos y un continente». Escribió el poema en 1975, es decir hace 44 años, y de algún modo no puedo dejar de pensar en todo lo que hemos perdido a causa del desastroso calentamiento global y del cambio climático... El hombre se pierde a sí mismo.
Ahora mismo, más precisamente anoche, estuve leyendo una traducción islandesa de la obra del gran poeta polaco Tadeusz Rozewicz.
La escritora de Auður Ava Ólafsdóttir
Tú eres un glaciar resplandeciente, mientras que yo soy solo una colina insignificante. Tú eres amenazadora, yo inofensivo.
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La excepción de Auður Ava Ólafsdóttir
Lo que no tendría que poder suceder tiene mucha más tendencia a ocurrir en la vida real que en una novela.
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Hotel silencio de Auður Ava Ólafsdóttir
Es más fácil expresar el dolor en forma de cifras que de nostalgia.
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La escritora de Auður Ava Ólafsdóttir
Dijo que algunas personas se engendran a sí mismas. Como tú. Me pidió que te saludara de su parte y dijo... que era preciso... tener un poco de caos dentro de sí... para poder dar a luz una estrella danzarina...
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La escritora de Auður Ava Ólafsdóttir
Los niños podrán ser crueles, pero los adultos son todavía peor.
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La escritora de Auður Ava Ólafsdóttir
Un poeta debe vivir en la sombra y experimentar las tinieblas. Contigo falta oscuridad, Helka. Tú eres luz.
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